Ludwigsburg recibe otra tarjeta roja: ¡la alarma por calor contraataca!

Ludwigsburg recibe otra tarjeta roja: ¡la alarma por calor contraataca!

La Oficina Alemana de Medio Ambiente (DUH) ha llevado a cabo su actual control de calor y el resultado para Ludwigsburg es aleccionador: la ciudad recibe otra tarjeta roja. Luisburgo ya obtuvo malos resultados en esta comparación el año pasado y los últimos datos muestran que la situación no ha mejorado. Con temperaturas superficiales de más de 36 grados en verano, la ciudad se calienta considerablemente, lo que se ve facilitado principalmente por la densa urbanización y las grandes zonas selladas del centro de la ciudad. Más del 50% de la superficie total de Ludwigsburg está cerrada, mientras que sólo alrededor del 2% está cubierta por árboles, setos o plantas con flores, como Stuttgarter Noticias informó.

Un alto nivel de sellado de superficies es problemático para una ciudad, especialmente en tiempos de cambio climático. Materiales como el hormigón, el vidrio y el metal retienen el calor y provocan temperaturas nocturnas más altas. Según la LUBW, el año pasado fue el más cálido desde que comenzaron los registros meteorológicos en Alemania. Las principales causas del estrés por calor incluyen la falta de espacios verdes y el sellado, lo que también se puede observar en otras ciudades como Heilbronn y Regensburg, que tampoco pasaron el control de calor, mientras que Ludwigsburg, junto con Ludwigshafen e Ingolstadt, es una de las pocas ciudades que recibió una tarjeta roja [DUH].

Medidas para mejorar la situación.

El alcalde Matthias Knecht destaca que la ciudad vigila activamente el problema del estrés térmico. Un concepto de adaptación climática, adoptado en 2016, pretende ayudar a mejorar la situación. Las medidas previstas incluyen la renovación de la Arsenalplatz y la creación de los llamados “cool stepping Stones”. Además, la ecologización de la Karlsplatz es otro proyecto que conviene abordar.

El control de calor se basa en datos satelitales que permiten un análisis de 190 ciudades con más de 50.000 habitantes. La comparación muestra que un gran número de zonas urbanas en Alemania se enfrentan a altos niveles de impermeabilidad y pocos espacios verdes. Un total de 24 ciudades recibieron una tarjeta roja, 82 una tarjeta amarilla y 84 una tarjeta verde. A pesar de la grave situación, el DUH pide al gobierno federal que deje de sellar áreas antes de 2035 e introduzca áreas verdes obligatorias.

El cambio climático como desafío

El desafío para ciudades como Ludwigsburg se ve agravado por la pérdida continua de árboles grandes y el grave impacto asociado sobre el efecto de enfriamiento en las áreas urbanas. Los planificadores urbanos y los científicos enfatizan la necesidad de áreas recreativas y espacios verdes dentro de las áreas metropolitanas. La recopilación inconsistente de datos por parte de los estados federados dificulta la implementación de las medidas necesarias, pero el uso de datos satelitales se considera una importante herramienta de planificación para la futura adaptación climática.