¿Estamos ahora amenazados por el invierno del siglo? ¡Eso está detrás del pronóstico!
Descubra cómo el vórtice polar determina los cambios climáticos y si se avecina un invierno frío en 2025. Conocimientos científicos y previsiones.

¿Estamos ahora amenazados por el invierno del siglo? ¡Eso está detrás del pronóstico!
El invierno está a la vuelta de la esquina, y mientras muchos se preparan para temperaturas gélidas y posibles días de nieve, el invierno del siglo puede estar en el horizonte. El responsable de esta tendencia es el vórtice polar, un elemento central de la circulación atmosférica, que se forma en altitudes de 30 a 50 kilómetros y alcanza su expresión más fuerte en los meses fríos. El vórtice polar tiene un impacto directo en el clima en latitudes medias, pero su fuerza puede variar y está influenciada por la interacción de varios factores, como la radiación solar y las corrientes oceánicas. Por ejemplo, un vórtice polar estable hace que el aire frío permanezca en las regiones polares, mientras que un vórtice debilitado puede promover irrupciones de aire frío en las latitudes medias. Sin embargo, un debilitamiento del vórtice polar no significa automáticamente un invierno frío en Alemania, como informa [HNA](https://www.hna.de/welt/hinter-der-wetter-prognose-droht-jetzt-der-jahr Jahrhundertwinter-das-steckt-zr-93982907.html).
Otro fenómeno interesante que influye en los pronósticos meteorológicos es el calentamiento estratosférico repentino (SSW). Estos fenómenos, conocidos desde 1952, ocurren en la estratosfera del hemisferio norte, particularmente en los meses de invierno, y pueden provocar restricciones masivas en el vórtice polar. Richard Scherhag, un meteorólogo berlinés, acuñó el término “fenómeno de Berlín” para los primeros SSW documentados. La temperatura en la estratosfera inferior aumenta en unos pocos días más de 50 grados Kelvin, lo que invierte los vientos del oeste en vientos del este y, a menudo, va acompañado de un aumento del frío en Europa Central.
Influencias sobre el clima en Europa Central
Las interacciones entre el Atlántico Norte, la troposfera y la estratosfera desempeñan un papel crucial en la frecuencia de estos calentamientos repentinos. El análisis de cosechas recientes muestra que estos eventos ocurren en promedio cada dos años y que la frecuencia aumentó significativamente en la década de 2000. Entre 1958 y 2019 se observaron un total de 37 eventos repentinos de calentamiento estratosférico, con una concentración particular en las últimas dos décadas. Estos cambios, incluida la inversión de los vientos del oeste y el enfriamiento asociado, pueden influir en la Oscilación del Atlántico Norte, que a su vez es crucial para las temperaturas invernales en Europa Central, como describe Wikipedia.
Actualmente, un patrón climático Omega sugiere que las condiciones climáticas cambiarán en octubre. Estas constelaciones meteorológicas especiales ya pueden indicar un invierno frío inminente, aunque las previsiones exactas son actualmente inciertas. Conclusión: El vórtice polar y el posible calentamiento estratosférico repentino siguen siendo factores esenciales a la hora de predecir el invierno. Al final, a pesar de todos los conocimientos meteorológicos, nadie puede decir con seguridad cómo será la situación meteorológica en un futuro próximo.