Recuerdos trágicos: Winnenden y la sed de comunidad

Recuerdos trágicos: Winnenden y la sed de comunidad

Una calurosa tarde de viernes en Winnenden: la temperatura sube a 30 grados y el aire se llena con los sonidos de la música pop de Suabia. En el pub “D-Zügle”, situado justo al lado de la estación de tren, hay un hombre con un cigarrillo en la mano y disfrutando de una cerveza. Detrás de él pende una gran bandera alemana y un banderín del VfB Stuttgart complementa la imagen del acogedor restaurante. El jardín de invierno, parcialmente cerrado por una lona de plástico, confiere al pub un encanto especial. Un taxi individual espera a un huésped frente al "D-Zügle".

Pero mientras la vida en el pub parece vibrante y despreocupada, los pensamientos del autor recuerdan los oscuros acontecimientos que sacudieron a Winnenden en 2009. En aquel momento, un chico de 17 años mató a 15 personas en su antigua escuela antes de quitarse la vida. La tragedia dejó una ola de horror en la ciudad y más allá. Los acontecimientos provocaron un endurecimiento de las leyes sobre armas en Alemania y duplicaron el número de psicólogos escolares en Baden-Württemberg. La familia del perpetrador también tuvo que reorganizar completamente sus vidas y comenzar con una nueva identidad después de que el padre fuera condenado por homicidio involuntario porque no aseguró adecuadamente sus armas.

Reflexión sobre el pasado y el presente.

Mientras el autor se detiene en el “D-Zügle” y toca la canción “Biervampir” del grupo punk Normmahl, reflexiona sobre los desafíos actuales. Normahl, fundada en 1978, está formada actualmente por trabajadores de campo, trabajadores sociales y especialistas en saneamiento y sus canciones a menudo se centran en la búsqueda del propio lugar en un mundo complejo. El estribillo de la canción, "Oh, soy el vampiro de la cerveza", habla de una sed insaciable en más de un sentido.

El tiroteo en Winnenden no sólo tuvo un impacto duradero en la propia ciudad, sino también en la percepción social
Deja huellas. La cobertura mediática del crimen fue duramente criticada, algo que también comentó el periodista Knut Bauer en una conversación radiofónica de archivo en 2019. La conmoción de 2009 sigue viva y tiñe la percepción de la ciudad, que no solo es conocida por su tragedia sino también por sus peculiaridades culturales.

Un lugar de memoria

Winnenden, conocida también por la empresa de limpieza a alta presión Kärcher y la panadería Maurer, ofrece a sus residentes un mercado semanal y varios restaurantes, entre ellos el "Jägerstüble". Estos lugares de reunión social son importantes para la comunidad, especialmente en un lugar que está indisolublemente ligado a tal tragedia. La visita al “D-Zügle” ofrece al autor la oportunidad de procesar los desafíos actuales del mundo y al mismo tiempo sentir una conexión con los recuerdos y la historia de su entorno.