Vertedero de Sonnenfeld: ¡Cantón exige un nuevo proceso de participación!

Vertedero de Sonnenfeld: ¡Cantón exige un nuevo proceso de participación!

El 5 de junio de 2025 se llevará a cabo otro proceso de participación en Eschenbach sobre el vertedero previsto en Sonnenfeld. Según el cantón, el proceso, que comenzó originalmente en 2019, debe repetirse debido a nuevos requisitos legales. En particular, en el procedimiento de recurso para otro vertedero se determinó que se requiere un procedimiento cantonal para los yacimientos mineros y vertederos de importancia suprarregional. Esto significa que la responsabilidad ahora recae en el cantón, que emite un plan cantonal de uso especial para el proyecto. El cantón también es responsable de la participación pública. El primer evento informativo se llevará a cabo el 17 de junio, el proceso de participación en sí comienza el 18 de junio y finaliza el 17 de agosto. Es posible enviar comentarios a través de la plataforma de participación cantonal, que está disponible en el llamado e-miteffekt.ch se puede llegar.

El avance del proyecto en Eschenbach ha suscitado mucha atención en los últimos años. En 2019 se llevó a cabo una amplia participación pública, seguida de un informe de tráfico regional en 2021 y la emisión de documentos de planificación revisados ​​en la primavera de 2022. Las objeciones recibidas se están procesando actualmente. Como informa el municipio de Eschenbach, sorprendentemente el departamento cantonal de construcción y medio ambiente se ha hecho cargo de la gestión del proyecto. Este cambio de rumbo conduce, por supuesto, a un cambio fundamental en los procedimientos: el plan cantonal de uso especial reemplaza al plan municipal originalmente planeado.

Reacciones a los cambios procesales

El cambio de procedimiento fue inesperado para la comunidad y los involucrados. Hasta ahora, el proceso de aprobación se ha llevado a cabo en estrecha coordinación con el cantón, lo que ha provocado cierta confusión y resentimiento entre el público. La decisión de cambiar las “reglas del juego” durante un proceso que ya dura más de cinco años se considera inusual y difícil de entender. Esto no sólo ha provocado un retraso en el proceso, sino también un aumento de los costes para los iniciadores del proyecto.

Otras partes implicadas, incluidas autoridades municipales y regionales, así como particulares y asociaciones, también expresan su descontento por el abrupto cambio de rumbo. La necesidad de repetir ahora varios pasos plantea dudas sobre la transparencia de la planificación y la aprobación y deja a los actores afectados en una situación tensa, ya que se ven afectados desde una perspectiva de costos y programación. Aún se desconocen los detalles sobre el nuevo proceso de aprobación cantonal, lo que aumenta aún más la incertidumbre.

El debate sobre el vertedero de Sonnenfeld muestra una vez más lo complejos que son los procesos en el ámbito de la ordenación del territorio y los retos que esto plantea para todos los implicados. Muchos esperan con impaciencia el proceso de participación, que comenzará pronto, sobre todo para ver cómo se pueden tener en cuenta los distintos intereses de forma equilibrada.